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En invierno, se aprovecha el agua subterránea constante para generar energía; en verano, no obstante, el calor de la superficie se vierte bajo tierra, ya que en esa época suele estar más fresca.
Son transformadores que convierten el calor subterráneo en energía térmica. Consta de tres partes.
Se trata del conjunto de tubos que transportan el agua subterránea a la superficie.
Se trata de una máquina termodinámica que, dependiendo de la estación, calienta o enfría el agua almacenada para generar energía.
Son sistemas que transmiten calor: suelos radiantes o fan-coils.
Cuanta menos distancia haya entre los puntos de recogida y de aplicación, el rendimiento será mayor y más eficaz.
El Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios, aprobado por el Real Decreto 1027/2007, establece las condiciones que deben cumplir las instalaciones.
Antes de pedir un presupuesto para la instalación geotérmica, hay que realizar un estudio para conocer las características de la zona. En este análisis se considerarán las características del suelo (dureza y temperatura subterránea), los trabajos de perforación y sistema de climatización, y, dependiendo del resultado, se elegirá un tipo u otro de circuito o sistema. Normalmente, los terrenos rocosos son más favorables que los terrenos de arcilla.
Al contrario de lo que ocurre con las placas fotovoltaicas, se necesitan profesionales o personas expertas para la colocación de una instalación geotérmica. Normalmente se instalan debajo del edificio, aprovechando el agujero para la construcción de los cimientos. También hará falta una pequeña sala de máquinas.
Averigua si hay alguna subvención en vigor.
Botón para subvencionesHay que realizar el mantenimiento de todo el sistema, al menos una vez al año; lo más recomendable sería realizarlo antes de verano y de invierno. Se comprueban los filtros, el nivel de presión y el estado del generador.
Las instalaciones geotérmicas cuestan entre 15.000 y 30.000 euros, más del doble que un sistema de gas o de gasoil. Existen tres condicionantes de precio: el tipo de suelo, el tamaño y el número de agujeros que hay que realizar, y la potencia del generador. El proceso más caro es el sondeo. En general, cada línea de metro agujereado cuesta unos 40 euros.
Si en una vivienda se consumen 52.500 kWh de energía, al año supondría un gasto de 1.858 €. En ese caso, se podría ahorrar en torno a 1.600 € y 3.000 € al año si se utilizara energía geotérmica, en comparación con las viviendas que tienen sistemas de gas natural o de gasoil. Se calcula que la inversión se amortiza entre 6 y 11 años.
¿En qué consiste y cómo se consigue?
¿En qué consiste y cómo se consigue?
¿En qué consiste y cómo se consigue?